El Gran Apagón: una teoría conspiranoica predice un apagón eléctrico en Europa

La Tierra es plana, las vacunas tienen chips dentro para vigilarnos, la nieve no arde y el volcán de La Palma fue activado por bombas nucleares. Las teorías conspiranoicas están de moda y hace unos pocos días un grupo de cientos de personas se congregaban para esperar la resurrección de JFK Jr. Ahora la teoría que está ganando más adeptos es la de un apagón a nivel europeo que nos dejaría en las oscuridad varios meses.

Sin duda la pandemia, un evento altamente improbable pero que finalmente sucedió, ha dejado mella en la percepción colectiva. La gente es más propensa a creer que diferentes fatalidades pueden ocurrir y estas teorías son fuente de clics y se difunden como la pólvora. No ayuda que los medios tradicionales se hagan eco de ellas y las tomen con seriedad.

Origen

En este caso se trata de una teoría que comenzó con en Austria. Las Fuerzas armadas de ese país difundieron a su población un vídeo informativo sobre cómo poder sobrellevar un hipotético apagón eléctrico. En el caso concreto de Austria, quieren prepararse ante este posible apagón porque su fuente de electricidad es el extranjero: Rusía y Ucrania de manera que ante una estrategia geopolítica complicada quieren prepararse aumentando su capacidad de autogenerar electricidad.

¿Significa esto que habrá un apagón confirmado? Por supuesto que no, de la misma manera que la DGT obliga a llevar triángulos de emergencia en los vehículos. ¿Puede que los necesites? Sí. ¿En caso de necesitarlos viene bien que los tengas a mano? Sí. Pues llévalos, nunca está de más.

Viralización

Sin embargo grupos conspiranoicos ven estas noticias como evidencias confirmadas de que nos tenemos que preparar para la catástrofe inminente. Comparten las noticias, sesgan el mensaje y lo proclaman como el inicio del fin.

Como estos mensajes dan muchos clics, medios de todo tipo se han hecho eco y a veces, al no contrastar las noticias repiten ese mensaje sesgado a una población que todavía está alarmada por la reciente (y actual) pandemia.

Sumado al incremento del coste de la luz presuntamente ligado a la escasez de energía junto a la descarbonización de las sociedades occidentales, parece que todo está blanco y en botella.

En consecuencia, la histeria ha hecho lo demás y todo el mundo está hablando sobre el gran apagón que no se sabe muy bien cuando, "seguramente", llegará.

Acopio de bienes

En países como Japón, donde son habituales los terremotos, los kits de emergencia son muy recomendados y existen en casi cualquier casa. Estos kits suelen llevar agua y comida que no caduca en años, elementos desinfectantes, alguna manta, ropa, linternas con radio para oír las noticias, productos de higiene... 

Eso es lo que recomiendan las autoridades mantener en casa en caso de emergencia. Sin embargo, cada persona va renovando estos kits cada muchos años y no hay un momento en el que todo el mundo presa del pánico acude a los supermercados a llevarse todos los productos no perecederos.

Es lo que está sucediendo con algunos productos: cocinas de gas para camping, linternas a pilas o solares, cargadores de batería del móvil solar... Cada vez es más difícil encontrarlos al igual que ocurrió durante la pandemia con el papel higiénico o la levadura.

Los expertos dudan del apagón

Los expertos que se han pronunciado sobre el tema ponen en duda un apagón, sobre todo un apagón total en España. A diferencia de Austria, España tiene puertos donde recibir buques metaneros y produce una cantidad razonable de electricidad para su consumo eléctrico. Tiene además reservas de gas en niveles aceptables.

Además indican que el consumo de electricidad de usuarios privados es ínfimo comparado con el que gasta la industria y sería la industria la que se apagaría primero en caso de falta de energía.

Peligro en la histeria

Creer que la Tierra es plana, en principio, no hace daño a nadie, pero meterse en un cohete casero basándose en reglas pseudocientíficas inventadas sí lo puede hacer. Las teorías pseudocientíficas en parecen inocuas pero pueden ser perjudiciales para toda la sociedad. Se han dado casos de todo tipo: personas que no se vacunan e impiden la erradicación de una enfermedad, personas que deciden no tomarse un tratamiento científico y curarse tomando pastillas de azúcar, personas que estafan a otras vendiéndoles la cura de todos los males por precios desorbitados, personas que ignoran las leyes porque un bien superior se lo ha pedido...

La pseudociencia puede causar cambios drásticos en los comportamientos de muchas personas y algunos medios, formales o pseudodivulgadores en las redes, no dejan de alimentarla por propio interés. Algunas redes ya han censurado este tipo de mensajes, veremos con el tiempo si esa censura es suficiente.