Las redes sociales e internet han cambiado el mundo que conocemos. Es algo que no sorprende a nadie. Sin embargo, nos hemos acostumbrado tanto a ellas que a veces no nos damos cuenta de la cantidad de personas que están trabajando en puestos de trabajo que, o eran tremendamente diferentes en el pasado, o simplemente no existían. Vamos a darle un repaso.
Community Manager
A día de hoy es una persona que lleva una o más redes sociales de una entidad, empresa o marca. Su labor fundamental es informar de novedades, atender a internautas que necesiten ayuda y presentar una imagen de marca que sea capaz de llamar la atención del público. Puede que además se encargue de crear contenido en un blog de empresa para llenar de contenido las redes y analizar las estadísticas de sus redes para conocer qué mensajes encajan mejor entre sus seguidores.
El valor añadido de un Community Manager a la empresa puede ser fundamental. Un buen Community Manager puede llegar a la audiencia sin necesidad de pasar por un medio de comunicación o creador de contenido. De esta manera la empresa o marca puede impactar positivamente en su imagen, atraer y mantener clientes.
Por otro lado, un Community Manager puede paliar el efecto de un evento negativo para la marca. Por ejemplo, en las elecciones madrileñas, el community manager de Metro de Madrid informó a todos los usuarios que decían que en el metro se había colocado una publicidad de tintes racistas que el cartel no estaba en las instalaciones de Metro sino en las de Cercanías.
Jardinero de Minecraft
Este puesto de trabajo levantó más de una ceja cuando se incluía en el plan España 2050, pero no es descabellado del todo. A día de hoy ya existen puestos como este. Una empresa inglesa, Whatshed tiene abierta esta oferta de trabajo en la que pagarán a alguien por jugar a Minecraft. Más concretamente necesitan a alguien con experiencia en diseño de paisajes y jardines para que creen una mejor experiencia para usuarios que deseen pagar por el servicio.
Aunque pueda parecer revolucionario no es la primera vez que pagarían a alguien para disfrutar de una ventaja en un videojuego. Siempre ha existido la compra-venta de cuentas en las que alguien ha dedicado tiempo en "entrenar" a los personajes virtuales en una plataforma para posteriormente venderlos. Similarmente también existen pequeños mercados dentro de los juegos donde se pueden comprar y vender objetos valiosos para el jugador.
Además, no es raro que los testers y personal de soporte de videojuegos se dediquen ya a jugar por dinero. Por ejemplo, en series de Youtube como "Karmaland" se podía ver que "los dioses" a menudo entraban al juego en modo super user a revisar bugs que ocurrieron durante la partida.
Editor de vídeo
El trabajo de edición no es nuevo. Todas las películas, documentales, series y programas de televisión ya se editaban antes de que existiese Internet. Hoy en día es posible trabajar como un editor de siempre pero empiezan a aparecer nuevos roles.
Las plataformas de stream como Twitch o Youtube descubren al mundo a nuevos creadores de contenido que se pasan ante la cámara muchas horas. Especialmente en el caso de los streamers de la plataforma de Amazon a menudo los streamers no tienen suficientes horas para emitir y a la vez editar vídeos resumen o vídeos con mejor calidad de edición. Es por ello que contratan editores que traspasen un formato de directo a clips de youtube o clips más pequeños para redes sociales.
Este nuevo rol cambia bastante del típico editor, ya que no solo cambian los formatos de vídeo sino que la forma de trabajar. Estos puestos ya no se desempeñan en estudios de televisión sino que la mayoría de los editores que trabajan para creadores de contenido teletrabajan.
Creador de contenido
Youtuber, streamers, instagramers, tiktokers, influencers... Son más que trabajos consolidados en el mundo web. Su trabajo se basa en la creación de un contenido que, por la razón que sea, atrae a mucha gente que les sigue. A partir de ahí monetizan esa fama de una u otra manera: colaboraciones con marcas, anuncios en su contenido, recibo de donaciones...
A partir de los creadores de contenido se generan muchos otros puestos de trabajo. No solo los ya mencionados editores sino que muchos de los creadores de contenido tienen gestores que les ayudan en diferentes ámbitos: declaración de impuestos, realizar acuerdos con marcas... Estos puestos de trabajo, si bien ya existían antes, ahora han de especializarse en un mundo cada vez más virtual.
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